Aroma lúcido.
Es un árbol,
Y es alucinógeno.
Te hace alucinar,
que su aroma
es trigo.
Cósmico.
Borracho.
Esas noches raras
de bajos bacilones,
palabras y risas.
Todo da vueltas y vueltas,
entre mujeres, ojos,
rodillas y mas risas.
Yo postrado,
apernado
al suelo y a la estupidez.
Aunque
Mujerable el espacio es.
Ya no escribo.
Por tu culpa se acabó
la sabia de tantos
y el latido
de otros cuantos!
Hoja y pluma.
Un lago en un árbol,
alcanzaba mi sed,
en la tierra cuajada,
por inviernos crueles.
La sombra de un Roble,
saluda a mi viento,
húmedo,
la hojarasca
serpentea entre troncos huecos.
Me subo a una hoja,
y navego por posas.
El charco de mi pulpa,
enturbiado por el viento.
Don Quijote de Lanahue.
(Abernuncio al hambre)
Alzada y puesta en pie
esta muerte viva,
con voz algo dormida
y lengua no muy despierta,
comenzó a decir de esta manera:
Yo soy Berlín,
aquel que las historias
dicen que tuve por padre al Calzón Roto.
Príncipe de las pastelerías y monarca.
Y archivo de la ciencia pastéurica.
Émulo de las cocsiones y a las horas,
que solapar pretenden las Lazañas
de los andantes bravos cabros chicos.
A quien tuve y tengo gran cariño.
Y puesto que es de los encantadores,
de los pasteles o pasteleros contino.
Dura la masa, áspera y fuerte.
La mía es tierna, blanda y amorosa.
Amiga de hacer ir al baño a todas gentes.
En las cavernas lóbregas del platón,
donde estaba mi alma entretenida
en formar ciertos rombos y caráteres,
llegó la voz doliente de la bella
y sin par
Crema del Berlín.
Supe su encantamento y su desgracia,
y su transformación de gentil golocina
en rústica golocina podrida;condolíme.
Y encerrado mi espíritu en el hueco
desta espantosa y fiera notomía,
después de haber revuelto cien mil condimentos,
desta mi ciencia encalzonrotada y torpe.
Vengo a dar el remedio que conviene
a tamaña hambre, a la mala hambre.
Escrito en el Natri desde Valdivia.
Congélame un segundo
En tus manos soy fecundo.
Y me lloro,
Y me río,
Y me lago,
Y me levanto.
No me digas trigo que hacer ¡
Eres muy inepto al parecer.
Yo sólo busco al atardecer
Una sombra fría que me embriague
Luego de enlodarme junto a robles.
Me muero de frío,
Me muero de hambre,
Me muero de muerte.
Este espacio es felino
Y siento su aroma salvaje,
Pues las joyas del ultraje
No verán otro destino.
Y yo sigo mi camino sin sendero alguno.
¡Las ratas me guiarán!
Aunque me han dicho que no me junte con extraños
Allá en aquellos lejanos años.
Yo las protegeré de los búhos y serpientes
Que persiguen la corriente
Donde desemboca mi muerte.
¡¡¡¡¡¡¡¡Mmmmiiiiiiiiiieeeeeeeerrrrrrrrrrdddddddaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!
¡Creo que nos perdimos!
¡Malditas ratas abominables!
¡Colilampiñas!
¡Inmundas!
¡Inplanetarias!
¡Váiganse de aquí!
¡Viráis!
Las sentencio a cadena alimenticia perpetua
En donde serán presa de búhos y serpientes.
Wajajajajajjajaja¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Las asustaré con mi risa Mc cabra,
Wajajajajajaj¡¡¡¡¡, Mc oveja
wajajajajajMc Donals…………..SÍ
¡¡¡¡¡¡Mc Donals¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
¡¡¡¡Eso si que las asusta!!!!!!!!!!
Ese será su fin.
¡Se verán en forma de hamburguesas
a un segundo de entrar a una putrefacta
boca de un pendejo cuico!!!!!!!!!!
Me resbalo en una roca,
Donde depositaba sus huevos
una araña loca.
Me pegué en la boca.
Quedé....
inepto!,
Salí…y,
leso!
Caminé ilesamente por el bosqueç
Tropezando a cada instante,
¡Todo por no saber qué quiere decir eso!
Al final quedé como inepto solamente
Para ahorrarme tropiezos lesos.
Llego al Mc Donals y le pregunto al cara de culo:
¿Dónde está el cara de Tapir que me vendió esta hamburguesa alucinógena?
Sueño en trigo.
Miro tu alfombra
de espalda hacia el cielo,
que acoje egoísta
sólo a las nuves.
¿No mirabas tu
la corteza terrestre?
¿No mirabas tu al
ave subterránea?
Quiero abusar de tus orejas,
mojarlas con mi aliento,
y engullir tu aroma a trigo.
¿Acaso fueron tus ojos
los que quebraron el silencio?
Vamos para el monte
a buscar mis arañas.
Tu cintura envuelta
me envuelve en el deseo,
y la carne de tu ombligo
le grita a mi ciega lengua.
¿Qué pasa trigo?
Estoy durmiendo.
¿Cómo me decías
que me dijiste que decías?
Ayer fui donde tu abuela
a buscar un par de años.
Me envolví con una manta,
en el trigo de tu noche.
Oye.
Cuando estamos congestionados con mucosidad,
y los oídos arden por el frío del viento,
me imagino troncos secos quemados,
y me acuerdo de la muerte,
me acuerdo del la muerte,
me acuerdo de la muerte.
Monte Nalhuelbuta.
Muéstrame tu dorso vestial
y camino sobre tus hombros,
tu nariz y tu pelo.
Enséñame tus secretos
perdidos de manantiales,
y bebo tu sed de bosque,
de esponja cautiva a la tierra.
Congélame en tus quebradas y
esteros de aguas frías,
y vierto mi vida a tu caudal
rocoso de estigmas verdes.
Palabra desequibocada.
Vale decir,
no decir nada,
es decir, creo que me
estoy corrompiendo,
entre palabras huecas haré
una canoa que alvergue
mis pensamientos difusos,
hasta alcanzar la estrofa
que me haga morir tranquilo
bajo la sombra del infortunio.
Te cuento o no?
Si pudieras responderme no importaría tampoco, uno siempre pregunta por preguntar. Por qué gastar tanta saliva y seso preguntando bueás?????? Además uno tiende a caer en errores como ¿Por qué preguntarse el por qué de las cosas? ¿Por qué me lo acabo de cuestionar? ¿es nesesario cuestionarse todo? Bueno en fin.... El otro día o mas bien, la otra noche, no importa cual, lo que importa es que no fue esta ni aquella, solo fue la otra. Yo iba caminando etílicamente para mi puerta, casa y pieza (eso es lo único que tenía en mente en ese momento) cuando derrepente paso por al lado de la comisería de la esquina e mi casa y miro hacia el interior. Había un par de pacos dentro de una sala y yo me quedé parado mirando hacia adentro;algo me extrañaba, y pude divisar una imagen "familiar": era AUGUSTO PINOCHET UGARTE, con su traje blanco y su banda tricolor atravesando su siniestra figura. Yo me dije a mi mismo (andaba muy ensimismado y tullido a esa hora de la etílica madrugada) me dije no, esto no puede ser por un segundo pensé que había un nuevo golpe y miré hacia los lados para asegurarme que niun milico culiao viniera a meterme la luma por la raja,,esto no puede ser esto las cagó , hoooo , cómo es la weá?.............. Unos instantes después pude dilusidar mejor la imagen. Y he ahí la verdad absoluta: Doña MICHELE BACHELET con su traje blanco y su banda tricolor atravesando su rechoncha figura enmarcada en una pared de la cual no recuerdo color.